Te imaginas estar en una carretera o una calle lejos de una estación de servicio de combustible y que el auto se quede sin gasolina. Pues con Booster esto no es un problema pues trae al mercado una revolucionaria forma de entrega de combustible.
Este negocio innovador lo que busca es llevar el combustible hasta donde estés al mismo precio que en una gasolinera. Este tipo de negocio genera una gran inversión de capital así como de capital humano, pues no es una tarea sencilla el repartir combustible a los autos de todo Estados Unidos.
Por eso, que en Booster se han creado cadenas de suministros que te atienden igual que cuando vas a una estación a rellenar tu tanque, con la diferencia de que son ellos quienes acuden a tu llamado. Olvídate de largas colas para esperar el despacho o estar bajo un sol abrasador.
¿Cómo funciona?
Todos usamos las aplicaciones de taxis hoy en día, pues el método para contratar a Booster será bajo el mismo método. La entrega es gratuita y no hay cuotas ni membresías.
- El primer paso es parquear tu vehículo como habitualmente lo haces.
- Mediante la aplicación en el celular, solicitas un Boost, este medio es el único por el que puedes pedir combustible.
- Abre la tapa del tanque de combustible. Disfruta tu día y realiza tus actividades como normalmente lo haces.
- Un profesional de Booster llegará y llenará tu tanque con el mejor combustible del país y al mejor precio.
- Recibirás una notificación cuando el trabajo ya esté hecho.
- Vuele a tu auto y dile hola a tu vida sin estaciones de gas.
Datos de interés
Booster cuenta con una flota 100% de carbono neutral. La empresa participa en programas que capturan emisiones de los vertederos. Estos programas tratan de captar el metano, un gas dañino que contribuye al efecto invernadero.
Este servicio es más seguro que el servicio que ofrecen las estaciones de gas. Tiene menores probabilidades de fugas y no contamina el suelo con pozos subterráneos de gas.
Los camiones morados de Booster ayudan a reducir las emisiones de carbono emitidas por los viajes a las estaciones de gas y por cada impulso ahorra 1.4 libras de emisiones de CO2.
Además de los camiones y que no tienen pozos subterráneos, las personas que trabajan para ellos son profesionales expertos en combustibles y tienen las certificaciones para demostrarlo.
Actualmente, se encuentran distribuyendo gas en 4 estados de Norteamérica, pero esperan expandirse a todo Estados Unidos.